“Juntos por el Cambio está roto”, admitió un referente de la coalición opositora a pocas horas de la dura derrota de Patricia Bullrich ante Sergio Massa y Javier Milei.
Los dirigentes de ese espacio amanecieron con una agria resaca anímica por la certeza de que será muy difícil revertir la sensación inexorable de fractura a partir de las disímiles posturas que se insinúan para el balotaje.
Las tensiones se instalaron en la noche del domingo en el búnker de JxC en Parque Norte: una de sus manifestaciones más dramáticas fue cuando Gerardo Morales, el titular de la UCR, le advirtió a Bullrich que no quería compartir ninguna reunión con Mauricio Macri, en la mira del ala dialoguista de la coalición por sus coqueteos con el candidato libertario.
Cuando en el salón VIP se armó una reunión cumbre de 10 dirigentes para definir el perfil del discurso que daría Bullrich, Morales se sumó recién cuando Macri abandonó el encuentro para saludar a unos parientes y miembros del PRO.
El mismo Morales se quedó cuidadosamente lejos de la primera línea de dirigentes de Juntos por el Cambio que rodearon a Bullrich en el escenario y ni esperó que terminara el discurso para irse y evitar cruzarse con Macri.
¿Cómo imaginar un funcionamiento armónico y consensuado de JxC si el jefe del radicalismo y el fundador del PRO terminaron así la peor noche de la fuerza opositora?
En las próximas horas habrá reuniones por separado de cada partido que integra Juntos por el Cambio y algunos promueven un encuentro de la Mesa Nacional de la coalición, aunque parece muy difícil que todos se vean las caras en la medida en que en los próximos días se produzcan definiciones del PRO, la UCR, la Coalición Cívica y Encuentro Republicano Federal en favor de Massa o de Milei para la segunda vuelta.
Tras la crisis del Gobierno, los titulares de las principales fuerzas de Juntos por el Cambio mantuvieron un encuentro virtual para analizar la situación política y económica, marcada por las nuevas designaciones en el gabinete, entre ellas la asunción de Silvina Batakis al Palacio de Hacienda.
A través de un comunicado de prensa, los dirigentes opositores expresaron sentir «mucha preocupación» ante el panorama actual y aseguraron que la realidad del país impacta de manera directa en la sociedad. «Observamos con mucha preocupación una fuerte debilidad política que genera graves consecuencias en millones de argentinos», afirmaron.
Patricia Bullich por el PRO; Gerardo Morales, titular de la UCR; Maximiliano Ferraro, el número dos de Lilita Carrió, fundadora de la CC y Miguel Ángel Pichetto al frente de Encuentro Republicano Federal conversaron acerca de la realidad del país y los pasos a seguir desde la principal coalición opositora.
“Estamos frente a un gobierno dividido en luchas intestinas, cuyo único objetivo es el poder, y esto agrava aún más la difícil situación económica, social, política e institucional”, consensuaron entre las partes al tiempo que enfatizaron en que los cambios de los últimos días, motorizados por la renuncia de Martín Guzmán significaron una mayor pérdida de poder adquisitivo que impactó de manera directa en la compleja situación económica que atraviesa el Gobierno.
Asimismo, señalaron: “Los cambios y medidas de la última semana han profundizado la pérdida del poder adquisitivo de manera significativa”.
El dardo que lanzó Facundo Manes contra la cúpula porteña de Juntos por el Cambio todavía hace eco en la interna bonaerense. Mientras Horacio Rodríguez Larreta y su candidato bonaerense Diego Santilli eludieron la confrontación, Elisa Carrió y María Eugenia Vidal apuntaron con crudeza contra el neurocientífico. En el radicalismo le bajan el tono al episodio.
“Este señor miente descaradamente”, fustigó Carrió. “No tengo dudas de que el dinero de impuestos no irá a la campaña electoral”, sentenció Vidal y consideró “una falta de respeto” ese tipo de “chicanas”.
El disparador fue la frase que Manes pronunció mientras pedía “una campaña lo más austera posible” por la pandemia: “Espero que no se gasten los impuestos de los porteños en la campaña”, dijo en una entrevista a La Nación.
El propio médico buscó quitarle peso horas más tarde. “Dije algo menor, parafraseando a (Joaquín) De la Torre, que es que esta es una campaña de David contra Goliat. Nada más”, aseguró en TN, en alusión al aparato político del PRO que respalda a Santilli en comparación con su armado.
En su entorno aseguran que no fue su intención levantar esta polvareda, que fue una frase al pasar y que se trató de una expresión de deseo para que haya austeridad en la campaña y no una acusación contra el ejecutivo porteño.
Igualmente, reconocen que el médico está fastidiado por cierto “bombardeo” que recibe en las redes, aunque no ahondarán en la discusión y apuestan a dejar “pasar la ola”
Larreta evitó confrontar. “No entramos en chicanas políticas y menos con gente de nuestro espacio. Para nosotros la campaña es contarle a la gente cómo vamos a resolver los problemas.”, respondió al ser consultado por el tema en una conferencia de prensa de la Ciudad.
La Mesa bonaerense de Juntos por el Cambio (JxC) mantuvo una reunión «técnica» con el objetivo de coordinar la inscripción de la alianza opositora en el distrito rumbo a las PASO, cuyo plazo vence este miércoles según el cronograma electoral, pero el encuentro tuvo su eje en la discusión por «el piso que tendrían que alcanzar las listas para ser competitivas».
El cónclave desarrollado esta tarde en el partido bonaerense de Vicente López, tuvo lugar en el marco de la fuerte disputa interna que existe en el espacio por los lugares en las listas en representación del estratégico distrito bonaerense.
Fuentes de JxC señalaron a Télam que, si bien el piso que se establecerá para las listas se terminará de definir este miércoles, casi sobre el plazo para la inscripción de alianzas electorales, «la discusión está en torno al 25%».
La definición llegaría este miércoles porque uno de los puntos que se discutieron es la posibilidad de poner dos porcentajes de pisos diferentes, uno para el tramo de las candidaturas nacionales y otro para las provinciales y distritales.
El exministro de Gobierno de María Eugenia Vidal, Joaquín de la Torre, anunció hoy que finalmente no dejará Juntos por el Cambio, pero criticó con dureza a Horacio Rodríguez Larreta y a Diego Santilli por la estrategia de postular al vicejefe de Gobierno en Provincia. Además, envió gestos de sintoní a Facundo Manes, que encabezará la lista del radicalismo.
De La Torre admitió que evaluó la posibilidad de salir de Juntos por el Cambio –espacio al que llegó de la mano de Vidal- y formar parte del armado del exministro de Transporte de Cristina Kirchner, Florencio Randazzo, que encabezará en la provincia una lista por un espacio en el que participan Graciela Camaño y Juan Manuel Urtubey, entre otros.
Sin embargo, ahora el exministro dijo que decidió quedarse en Juntos por el Cambio porque “hay cuestiones que me entusiasman a quedarme”, según le dijo a la edición web del diario La Nación.
Ariel Díaz se sumó a dirigentes que acompañan a Emilio Monzó y sobre el particular habló en LT 20 Radio Junín.
Cabe recordar que el juninense se había alejado del cargo que ocupó en el Departamento Ejecutivo como Secretario de Hacienda.
La decisión tomada en aquel momento tuvo que ver “con cuestiones personales. Mis necesidades pasaban por otro lado y volví a mi actividad anterior», recordó.
LA VUELTA AL RUEDO
El presente lo encuentra acompañando a Emilio Monzó y debido a que “creo que es un político que siempre levantó la bandera del diálogo, con la búsqueda de consenso”.
En tal sentido Díaz remarcó que “hay mucha gente que espera que los que estamos en política terminemos de pelearnos”.
Desde los “extremos –acotó-, se hace muy difícil construir y con él queremos forjar un país que nos abarque para confluir en el centro al menos para dialogar”.
En lo personal hizo “un pequeño repaso de Juntos por el Cambio de 2015.
Tiempos en los que comenzaron a trabajar juntos, tanto desde, “la UCR como la Coalición Cívica, el Partido Fe, el Pro. En 2015.
“Después de 6 años continúa unido y con más fuerza que en el comienzo cuando muchos dudaban de la perdurabilidad”
Ahora, considera Díaz, es “tiempo que el “frente se vaya adaptando a buenos nuevos escenarios y en búsqueda de mayor apertura”.
Recordó que si bien en 2019 no nos fue bien e nivel nacional más allá del alto nivel de votos. No se pudo retener el gobierno nacional o provincial y con esfuerzo se pudo mantener en Junín”.
En la actualidad, “creemos que es necesaria una apertura. Hay muchos que quizás no lo van a compartir pero creemos que es necesaria esa apertura de cara al futuro”.
“Mi trabajo y el del equipo es apuntar a ese objetivo”, concluyó el entrevistado.
Al igual que el ex intendente Mario Meoni, otro político anunció su retiro luego de la derrota en las elecciones. Se trata de Daniel Salvador, el vicegobernador de la Provincia de Buenos Aires.
En diálogo con Mañana Digital por LT20 Radio Junín, Salvador hizo un resumen de todo lo que fue la gestión que encabezó acompañando a María Eugenia Vidal. A su vez, se refirió a la transición con Verónica Magario, su futuro en la Unión Cívica Radical y la disputa de Macri y Cornejo.
Por otro lado, también el vicegobernador saliente se deshizo en elogios para con el intendente de Junín, Pablo Petrecca. «Hizo una administración ejemplar y tuvo un enorme acompañamiento. Para nosotros es una satisfacción muy grande que haya sido revalidado por los vecinos de Junín. Tuvo un acompañamiento constante y permanente del Comité Radical. Tengo la certeza de que en estos cuatro años que vienen seguirá haciendo lo mejor para que Junín esté cada día un poquito mejor”, afirmó Salvador.
Con respecto a su retiro de la política electoral, el ex legislador admitió que «es una etapa claramente superada». «Tuve la satisfacción de haber sido parte del gobierno de Raúl Alfonsín y de este gobierno encabezado por Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal», continuó Salvador.
El funcionario, además, destacó la gestión de su gobierno con el SAME, que está en 122 de 135 municipios. Según él, «no se discriminó y hubo políticas muy importantes en lo que es la recuperación de valores y la pelea contra las mafias».
Por último, Salvador se mostró orgulloso y tranquilo de haber formado parte de esta gestión que, según su parecer, fue «honesta y eficaz».