La secretaria de Gobierno, Agustina de Miguel, confirmó que al tomar conocimiento de la resolución de la Provincia de Buenos Aires, decidieron volver a poner en marcha la ordenanza local de Fase 4 flexibilizada, que permite la continuidad laboral de las actividades deportivas.
«Hoy se ha dado mayor relevancia a la fuente de trabajo. Si bien durante los primeros meses de la emergencia sanitaria tuvimos un período muy crítico respecto de la apertura de todo tipo de actividad y servicio, hoy tras 120 días, la realidad es otra. Son muchos meses y la preservación de la fuente de trabajo de los juninenses se ha convertido en una prioridad», agregó.
Miembros del gabinete municipal mantuvieron una reunión con representantes y profesores de diferentes ramas deportivas, recreativas y culturales y firmaron, en horas de la tarde de este lunes, un nuevo compromiso de responsabilidad social para continuar con sus actividades.
«Lo que estamos haciendo es apelar a la responsabilidad de cada uno de los que desarrollan estas tareas, que no sólo se circunscriben al deporte al aire libre sino que, hay actividades que más allá del permiso provincial, quedarían afuera por no desarrollarse en clubes o polideportivos, entonces, deberían cerrar», expresó la funcionaria.
Uno de los mayores deseos de cientos de juninenses es volver a disfrutar de su habitual rutina de ejercicio. Todos los gimnasios se encuentran totalmente cerrados y no parece sea pronto el día en el que puedan reabrir sus puertas. Esta situación no sólo genera malestar y preocupación en los clientes, sino también en los dueños ya que son un rubro que no puede trabajar vía online y esto implica una caída total de los ingresos.
El programa radial Mañana Digital dialogó con un empresario del rubro, Jorge Echeverría, quien brindó precisiones sobre cómo se encuentra el sector. En la entrevista, además contó que los gimnasios están buscando alternativas para poder reabrir.
¿Cómo sería la vuelta a los gimnasios? Además de cumplir con los requisitos ya instaurados, sería a través de turnos de 40 minutos. Otro dato relevante es que no todas las personas podrían ir, sino que los mayores de 70 tendrían que esperar aún más.
Lo cierto es que en la actualidad todos los gimnasios de Junín y la Argentina lo están pasando mal. A la falta de ingresos se le suma que los gatos no bajan, los salarios deben pagarse y los servicios no dan tregua al bolsillo. Sobre esto Echeverría dijo: «No escapamos a otros rubros, pero en lo particular estamos muy complicados porque tenemos empleados, impuestos y no tenemos ni el más mínimo ingreso. Pareciera que a corto plazo no habrá solución”.