Héctor Azil, secretario general de ATSA Filial Junín, habló sobre los cambios en los gabinetes nacional y provincial y expresó que «los que estamos y conocemos la política, y sobre todo el justicialismo, habíamos visto dos falencias dentro de la coalición, que faltaba tanto en lo nacional como provincial. Se veía la falta de gobernadores y de intendentes y los cambios fueron en ese camino. Uno no puede ser adivino en saber si esto va a dar resultado, pero creo que el camino es el correcto, hay que leer el llamado de atención que le dio la sociedad. La clave está en cómo se gobierna y no en el resultado de una elección. Los cambios eran necesarios, no se podía seguir en ese rumbo como si nada hubiera pasado».
Un convenio para la atención de afiliados al PAMI por parte de la Clínica IMEC (Instituto Médico de la Comunidad) es el principio de salida a la dura situación económico-financiera que atraviesa desde hace meses el establecimiento asistencial.
La coyuntura llevó a medidas de fuerza y quite de colaboración y paro por parte del personal, a quien se le debía parte importante de sus haberes.
“Por suerte se concretará la solución de una preocupación que teníamos desde hace mucho tiempo, porque más allá e que se aceleraron las gestiones en el último mes, se concretaron gestiones tanto del ministro de Transporte Mario Meoni como de Andrés Merani. Así se trabajó para ver de qué manera podía hallarse una salida a la situación y articular una especie de rescate por parte del PAMI. A su vez, si bien no soy yo quien debe dar la información, más adelante también se concretaría un convenio con IOMA”, expresó Héctor Azil, secretario general de ATSA-Junín (Asociación de Trabajadores de la Sanidad).
Los trabajadores
Destacó que “lo que nos interesa a nosotros es que se le da certidumbre a cien familias de trabajadores” que atravesaron situaciones acuciantes. “Ellos vienen desde hace mucho tiempo con esa incertidumbre de no saber cuánto tiempo más iba a subsistir la clínica. Esto le dará un horizonte de previsibilidad y les permitirá trabajar con la cabeza despejada sabiendo que podrán cobrar sus sueldos y al otro mes, podrán mantener el trabajo”.
“Estamos muy agradecidos a quienes desde la política han conseguido esta solución” porque “muchas veces se desprestigia la política, y esto se destrabó gracias a una gestión de lo que se llama Política, con mayúsculas” enfatizó.
IMEC actualmente está trabajando parcialmente, ya que no realiza internaciones.
“El conocimiento de este acuerdo, ha dado una cierta tranquilidad a los trabajadores”, concluyó Azil.
Unos cien trabajadores de la salud de clínica IMEC aún no cobraron sueldo de noviembre ni aguinaldo. Por esta situación que, según dicen no es nueva en este nosocomio privado, pararán por 24 horas. Mañana martes queda garantizada la atención de guardias mínimas.
Estaba pautada para este lunes una reunión en el Ministerio de Trabajo. Lo que tenían pensado – hasta hoy a la mañana – era no aceptar una conciliación obligatoria. «La medida de fuerza se levantará, siempre y cuando, se dé el pago de lo adeudado».
El secretario general de ATSA filial Junín remarcó que «el empleado ya prestó su parte de la contratación. Lo mínimo que puede hacer un empleador y debe hacer es pagar en término. Hoy es 21 de diciembre y el personal todavía no cobró el sueldo de noviembre y se le debe también el aguinaldo».
Héctor Azil dijo que «se suma un hartazgo del personal. Hay situaciones que vienen pasando desde hace mucho tiempo. Hemos realizado denuncias al respecto. No es la primera vez que hay atrasos».
“En este año de pandemia, el trabajador estuvo expuesto y decenas de compañeros se han infectado por COVID. Además, las clínicas recibieron el ATP. El Estado se hizo cargo, en algunos casos, de hasta el 70 por ciento de los salarios. IMEC es la única clínica que generó despidos en cuarentena. Además, se dieron situaciones de maltrato laboral que están denunciadas en el Ministerio de Trabajo«.
Programa de Recuperación Productiva
A partir del año que viene, las empresas de salud, tienen la posibilidad de adherirse al nuevo REPRO (Programa de Recuperación Productiva). El Estado va a pagar 9 mil pesos por trabajador durante seis meses con la posibilidad de renovar. «Han recibido ayuda como nunca. La verdad es que nosotros no estamos para escuchar lamentaciones», sostuvo el sindicalista.